La utilización de un gas como el nitrógeno dentro de un entorno cerrado (como una bolsa Exit de plástico) puede ser un medio adecuado para lograr una muerte autoinfligida sencilla, eficaz, apacible y totalmente legal. Aunque la investigación realizada por Exit ha encontrado que relativamente pocas personas preferirían utilizar una bolsa de plástico y gas en lugar de la simple ingestión de una “píldora apacible”, sigue siendo uno de los métodos más accesibles y fiables disponibles.
Utilización de un gas inerte para morir por hipoxia La fisiología
La hipoxia es un término que significa “bajo nivel de oxígeno”. La muerte que se produce debido a una insuficiente inhalación de oxígeno es una muerte hipóxica. Aunque esta se puede producir de diversas formas, el método más habitual es introducirse repentinamente en un entorno sin oxígeno.
La forma más sencilla de hacerlo es llenando una bolsa de plástico con un gas inerte y luego colocársela rápidamente sobre la cabeza. Para comprender por qué la bolsa Exit de plástico facilita una forma apacible y fiable de morir, es útil tener un conocimiento básico de la fisiología humana.
En la vida normal, respiramos en una atmósfera que tiene un 21% de oxígeno. Curiosamente, cuando disminuye el nivel de oxígeno en el aire que inhalamos, no sentimos alarma ni preocupación. Mientras podamos respirar con facilidad, la sensación que se experimenta a medida que baja el nivel de oxígeno es la de desorientación, confusión, falta de coordinación y pérdida del conocimiento. La muerte se produce poco después. Esta experiencia a veces se compara con estar borracho (intoxicación por alcohol).