La construcción de la máquina empezó en 2014. Las instrucciones, en la primera máquina, se daban presionando un pulsador “Sí” (verde) o “No” (rojo) en el estuche del microprocesador Raspberry Pi. Otra entrada de datos a la máquina venía de un oxímetro (CONTEC CMS50D+) que ofrece la onda del pulso, la frecuencia cardíaca y la saturación a través de una entrada USB, y una fuente de alimentación USB de 5,2 voltios. La salida de datos presentados de forma visual se hacía vía HDMI a una pantalla que mostraba el trazo cardíaco, oxigenación y pulso junto con la presentación secuencial de las tres siguientes preguntas:
¿Es usted consciente de que si pasa a la última pantalla y pulsa el botón “Sí” recibirá una dosis letal de gas y morirá?
¿Está seguro de comprender que si continúa y pulsa el botón “Sí” para ir a la próxima pantalla morirá?