Cuando planee utilizar fármacos de medicación previa o potenciadores, es aconsejable probarlos antes de su uso. Esto permitirá la determinación de la dosis y revelará cualquier sensibilidad inesperada o reacciones adversas.
Sedantes y ansiolíticos
Los sedantes y los ansiolíticos son útiles para aliviar la ansiedad y potenciar la acción de un fármaco letal. Entre los ejemplos se encuentran:
El alcohol puede desempeñar un papel útil en cuanto al alivio de la ansiedad y la potenciación de la acción de muchos fármacos letales. Como medicación previa, debe tomarse con cuidado para que el juicio no se vea afectado. Esto es particularmente importante cuando hay varios pasos involucrados, como iniciar el flujo de gas y colocar una bolsa Exit. Tenga en cuenta también que el alcohol a veces puede ser totalmente contraproducente. El alcohol puede limitar la eficacia de un antiemético y, en lugar de prevenir el vómito, puede provocarlo.
El alcohol también puede ser útil como medicación a posteriori, momento en el cual se pueden tomar bebidas espirituosas o un licor para eliminar el regusto de un barbitúrico letal como el Nembutal. La acción depresora respiratoria del alcohol y su rápida actuación, pueden potenciar de manera útil los fármacos hipóxicos letales como la morfina y otros opiáceos, los barbitúricos, el hidrato de cloral, etc. La cantidad de alcohol a ingerir dependerá de la sensibilidad y experiencia personal. Úselo con cuidado.