Una red privada virtual (o VPN) es un grupo de ordenadores conectados a su propia red en algún lugar de Internet. Si bien esto puede sonar a jerga tecnológica para los profanos en la materia, tal vez sea más fácil entender qué es una VPN por la función que cumple. Y esta es garantizar que toda la información que usted envíe y reciba esté codificada y no pueda ser interceptada.
Una VPN sirve para varios propósitos. En primer lugar, una VPN garantiza que sus datos estén codificados y que un tercero no pueda interceptarlos. Esto se aplica tanto a los datos que usted busca y recibe como a los que envía, y es especialmente importante si desea privacidad absoluta en Internet ya que desea eliminar la posibilidad de que alguien que no conoce pueda acceder a sus comunicaciones.
En segundo lugar, una VPN le permite disfrazar su verdadera ubicación en el mundo. Lo hace ocultando la verdadera dirección IP de su ordenador. Al igual que su buzón de correo postal de la vida real, su ordenador tiene una dirección (llamada dirección IP) que lo diferencia de todos los demás en Internet.
Enmascarar su dirección IP también le permite a usted pretender estar en otro lugar del mundo. Esto es especialmente útil si está intentando acceder al contenido restringido por ubicación. Piense en la plataforma iPlayer de la BBC por ejemplo. Para acceder a iPlayer necesita estar en el Reino Unido. Sin embargo, incluso si usted se encuentra en los EE. UU., siempre que configure su VPN en el Reino Unido, podrá eludir las restricciones de ubicación de la BBC.