Cuando se aprobó la Ley de Derechos de los Enfermos Terminales (ROTI Act) en el Territorio del Norte de Australia, recibí como encargo el desafío de tener que decidir qué medicamento o sustancia produciría la más humana, apacible y segura de las muertes.
Tras muchas pesquisas y consultas –un proceso que incluso nos llevó a buscar información sobre los productos utilizados para ejecuciones en los Estados Unidos– se decidió aprobar el uso de una dosis grande de Nembutal por vía intravenosa u oral.
Las cuatro personas que murieron al amparo de la ley mencionada lo hicieron inyectándose ellas mismas Nembutal (con la ayuda de la Máquina Deliverance, actualmente expuesta en el Museo Británico de ciencias) Ver: http://en.wikipedia.org/wiki/File:Euthanasia_machine_(Australia).JPG