La prueba inicial del casco se llevó a cabo utilizando un casco 3M-Versaflo S-533L (como figura en la página siguiente). Cuando se utiliza para servir de protección contra contaminantes o patógenos transportados por el aire, el casco se conecta a una bomba de aire portátil que suministra aire filtrado a una velocidad de unos 200 litros por minuto.
Para probar la idoneidad del casco como sustitución de la bolsa Exit, este se colocó sobre un maniquí. La entrada se conectó a una bombona de 2 litros de nitrógeno comprimido. Por medio de un regulador de flujo Max Dog, la velocidad de suministro se fijó en 25 litros por minuto (el ajuste máximo en el regulador). La composición del gas se ensayó en una posición cercana a la nariz usando un analizador de gas RKI Eagle (ver el diagrama siguiente).
Al abrir el nitrógeno, se produjo un rápido descenso en el nivel de oxígeno dentro del casco. En 30 segundos, el nivel de [O2] había disminuido del 21% ambiental a menos del 1%. Si una persona inhala profundamente con el casco puesto, perdería el conocimiento de inmediato y moriría rápidamente. Como en el caso de la bolsa Exit, el flujo de nitrógeno que sale del casco por la zona del cuello garantiza que no se produzca acumulación de dióxido de carbono [CO2] dentro del mismo.
Se muestra un vídeo del procedimiento de la prueba.
La máscara 3M está disponible en Amazon por unos 85 USD: https://www.3m.com/3M/en_US/p/d/v000094208/
Actualmente se están realizando más pruebas para examinar la posible modificación del MicroClimate Air.