Los primeros síntomas de la sobredosis aparecerán a los 30 minutos de la ingestión. La muerte usualmente ocurrirá entre 1 - 3 horas después. La somnolencia y el mareo progresan rápidamente hacia la pérdida de la consciencia y el shock. Sigue la muerte por paro cardíaco.
Potenciadores y otros fármacos suplementarios
Aunque el volumen de este líquido letal puede ser pequeño, es extremadamente amargo y los antieméticos son esenciales. Es aconsejable tomar 3 comprimidos de 10 mg de metoclopramida tomados 40 minutos antes.
Se recomienda el uso de benzodiacepinas para enmascarar los síntomas desagradables asociados con las propiedades cardiotóxicas del fármaco. Un medicamento de acción media a rápida como el oxazepam (por ejemplo, 3 comprimidos de 30 mg de Seresta) tomado inmediatamente después de la cloroquina sería eficaz.
El efecto protector de la benzodiacepina Valium (diazepam), en particular, del que se ha informado ha sido objeto de un debate considerable. Los artículos aparecidos en revistas médicas describen la utilización de Valium en casos de sobredosis grave como una medida para salvar vidas. Por esta razón, se debe evitar la utilización intercurrente de este medicamento. Se puede lograr una potenciación específica tomando cimetidina, antagonista H2 (por ej., 800 mg de Tagamet ingerido como dosis previa con el antiemético). La cimetidina interfiere con el metabolismo de la cloroquina y eleva los niveles séricos.
También son útiles otros fármacos para aumentar los efectos letales de la cloroquina. Por ejemplo, el alcohol, junto con los depresores respiratorios (barbitúricos) o los inhibidores cardíacos (betabloqueantes) pueden servir para este propósito.