SEGURIDAD PÚBLICA
proporcionan todo tipo de protección para que nunca sean investigados; bajo argumentos que son prácticamente una burla, como el hecho de que “los delin- cuentes se colocan en las sucursales y están observando a todos los clientes y se percatan quiénes son las personas que realizan retiros considerables de dinero”. No obstante si una persona asiste
a una sucursal donde fue asaltado un cuentahabiente, se puede percatar que es prácticamente imposible esta situa- ción, y es más factible que el propio em- pleado proporcionara la información a terceros para que se consumiera el asal- to y sólo tendría que tardarse unos cinco a 10 minutos para que los delincuentes lleguen a la sucursal. La pregunta que todos nos haríamos
En el establecimiento de procesos de
prevención, cuando se pretende preve- nir la comisión de un ilícito y se consi- dera la participación de un tercero que puede encontrarse oculto o en el ano- nimato y además protegido para que su conducta se mantenga en la impunidad, las técnicas psicológicas deben de con- siderarse como una herramienta valiosa a fin de que los mecanismos de preven- ción operen con mayor eficacia. Se estima que en el 80% de los se-
cuestros se encuentra involucrada una persona que es muy cercana a la víctima, quien pudo proporcionar la información suficiente para que se pueda consumar la acción; puede ser empleado, amigo, in- clusive hasta familiar cercano. En los ase- guramientos de secuestradores se hace la imputación del delito, se les consigna y someten a juicios penales a los detenidos; pero las personas que participaron en la conceptualización del secuestro nunca son detenidos. Por lo que se mantienen en un estado de impunidad. Otro caso es el asalto a los cuenta-
habientes que después de retirar una cantidad considerada de dinero en efec- tivo, al salir de la sucursal son asaltados, donde inclusive los delincuentes saben la cantidad exacta que retiraron y hasta el lugar donde se guardaron el dinero. Cuando la policía detiene a estos delin- cuentes, se les castiga por el asalto, mas nunca se investiga cómo lograron obte- ner la información. En este caso es ineludible la partici-
pación de empleados deshonestos que laboran en los bancos, pero sistemática- mente los gerentes de las sucursales les
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consiste en ¿dónde se encuentran los delincuentes que llegan en cinco o 10 minutos a una sucursal? La respuesta, la encontramos en diversas actividades que operan sin el control de un super- visor laboral, como valet parkings, fra- neleros, vendedores ambulantes y ac- tividades donde el delincuente puede encontrar una forma de demostrar su ocupación y pasar desapercibido. Por otra parte, si consideramos que los
secuestradores y los asaltantes de cuenta- habientes no tienen un medio para obte- ner la información y cometer sus delitos, tendríamos que considerar también que nos encontramos ante una nueva genera- ción de “criminales adivinos”. Considerando que tanto los secues-
trados como los asaltados, mantuvieron todo un proceso de prevención en sus actividades; pero fueron víctimas, debe- mos de establecer que el Gobierno debe de coadyuvar con los mecanismos de prevención de las personas. Tomando como base estos dos ejemplos que son únicamente representativos, sin embar- go no los únicos que se deben considerar. Se debe establecer el reforzamiento de la prevención y esto se logra con un apoyo a la vulnerabilidad, donde las víctimas ya no pueden ampliar su protección. Ya sea bajo legislación especial o bajo
disposición de las autoridades compe- tentes, crear procesos de investigación donde no sea nada más la detención del delincuente que abarque en forma paralela la investigación de los posibles relacionados o facilitadores para la con- sumación del ilícito.
POLÍGRAFO Y PROCESOS PSICOLÓGICOS
Si se establece que en cada secuestro o en cada asalto a cuentahabientes, las personas que pudieron proporcionar in-
* Acerca del autor
- José Luis Rojo y Arabi, CPP, CPO, DSE, es presidente de la Asociación Nacional de la Industria de la Seguridad (ANAINSE). Si desea conocer más acerca del autor, consulte su CV:
seguridadenamerica.com.mx/colaborador.php
formación se sometieran a pruebas poli- gráficas realizadas por profesionales en esta especialidad, se tendrían dos bene- ficios, uno consistente en la posibilidad de descubrir a los cómplices de los deli- tos y la otra que tiene procesos psicoló- gicos que generan una preocupación en las personas, los cuales actuarían como inhibidor para participar en estos deli- tos, creando en la mente un estado de preocupación al saber que podrá ser identificada su participación. La prevención es una combinación
de reglas y medidas de precaución que deben adoptar todas las personas; pero deben ser desarrolladas por individuos que cuenten con gran experiencia y co- nocimientos sobre la materia. Además que hayan realizado estudios del com- portamiento humano en sus dos ver- tientes: la conducta social y antisocial. La propuesta del presidente de la
República es perfectamente definida, mas se tiene que capacitar a toda la po- blación para que cuente con los cono- cimientos suficientes para que tenga el efecto que se pretende obtener. Es en este punto donde radica el
éxito y por lo mismo se debe tener una dependencia especial, ya sea de nueva creación o definiendo a una que ya esté operando, que tenga como función lo- grar la disminución de los delitos. Si se logra a través de la prevención
que un 20% de los ciudadanos sepan au- toprotegerse, se tendrá como resultado un 20% de disminución en las estadísti- cas de siniestralidad y se avanzaría en el proceso de recuperación de la seguridad y paz social. La seguridad se construye desde la
prevención. La sola persecución del de- lito es un medio que únicamente permi- te rotar en un sólo sentido, sin disminu- ción de la siniestralidad. n
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