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Análisis del Discurso de Rubalcaba


Análisis del discurso de Rubalcaba:


Con R de RbCb Por: Ruth Carrasco


cialistas que, desorientados tras el oscuro panorama electoral que dejo tras de sí el 22M, buscan esperan- za e ilusión. Por los periodistas, la gente de los medios de co-


E


municación, que buscan afilar su pluma y ver como se dirime la contradicción de ofrecer nuevas pro- puestas del PSOE siendo un histórico socialista y vi- cepresidente hasta hace unas semanas del Gobierno de Zapatero que ha sufrido un gran desgaste debido a la gestión de la crisis económica. Por la oposición, que debe estar pendiente de


cada movimiento de Rubalcaba porque saben que es un duro hueso de roer.


El PP no puede dar las elecciones por ganadas. De hecho,el primer Barómetro del CIS correspon- diente al mes de julio (el primero desde que Rubal- caba fue oficialmente designado como candidato ) revela que el PSOE recorta más de 3 puntos la venta- ja del PP de cara a las elecciones. En esa misma encuesta, Rubalcaba saca mejor


“Hagamos que suceda” podría ser un himno de campaña. Unas palabras cargadas de intención, sencillas pero ambiciosas: “Es posible, pero es tarea de todos, vamos a hacerlo”.


54 Campaigns&Elections Septiembre 2011


l discurso de Rubalcaba en su bautizo como candidato por el PSOE a la Pre- sidencia del Gobierno levantó mucha expectación. Era muy esperado. Por militantes / simpatizantes so-


puntuación que Rajoy en todos los indicadores: Más eficaz, más dialogante, entiende mejor los proble- mas de España, tiene más capacidad de negociación ,se le percibe como más honesto y tiene más visión de futuro. Aún así, el Partido Popular esta 7 puntos por encima que los socialistas en cuanto a la estima- ción de voto según esta misma encuesta.


Buscando un Yes, we can Las palabras cambian el mundo. Seguramente, quien este leyendo este articulo podrá distinguir algunas frases de los discursos políticos más importantes de la historia. Si digo “No te preguntes qué puede hacer tu país por ti, pregúntate que puedes hacer tú por tu país” nos vendrá a la cabeza Kennedy y si escribo “Yo ten- go un sueño” Martin Luther King Jr. Seguramente son palabras que cambiaron el curso la historia. Encontrar esas palabras eficaces y emocionales no es tarea fácil, sobre todo porque, como diría Frank Luntz, “lo impor- tante no es lo que tú dices, es lo que ellos entienden”. Para un discurso, como para casi todo, es impor-


tante un buen comienzo y, quizá más, un gran final. En este caso, el cierre estaba muy bien cuidado: una lla- mada a la esperanza, a la confianza y también a la res- ponsabilidad de los socialistas. Una necesaria llamada a la esperanza y a la ilusión de las bases socialistas, ya que son parte fundamental de una campaña exitosa. Y lo vamos a hacer, lo vamos hacer. Mirad, por-


que queremos hacerlo, y lo veo en vuestras caras y en vuestros aplausos que han llevado este discurso a ser mucho más largo de lo que hubiera querido y a mí a sudar mucho más de lo que hubiera deseado. Lo vamos a hacer porque queremos hacerlo, lo va- mos a hacer porque podemos hacerlo y lo vamos a hacer, sobre todo, porque sabemos hacerlo, porque lo hemos hecho ya otras veces en nuestra historia.


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