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Perdón y discurso político


de su competencia. Entre los casos en los que no se puede respon-


sabilizar al líder de forma directa respecto podemos citar el perdón solicitado por Sarkozy a los Irlandeses después de que la selección francesa de fútbol deja- se a los británicos fuera del pasado mundial tras una flagrante mano de Tierry Henry. ¿Qué culpa tenía él? Ninguna, pero en este caso le honra disculparse por la acción de un compatriota que supuso una mancha en la imagen del país galo. Existen ejemplos de todo tipo a lo largo de la


Bill Clinton Esta imagen es tomada de la página www.es.wikipedia.org


historia, desde Platón al emperador de Sacro Impe- ro Romano, Enrique IV, pasando por Galileo. Pese a esto, cabe pensar que las consecuencias que conlleva la solicitud de perdón, provoca que esta práctica no esté muy extendida. A los ejemplos ya mencionados, se podrían añadir otros más cercanos. De este modo, Bill Clinton pidió perdón por su affaire con Monica Lewinsky, Aznar pidió una disculpa fugaz por la ges- tión de la crisis del petrolero Prestige y Tony Blair por el argumento de las armas de destrucción masiva. Otros casos más actuales los hemos visto con las dis- culpas de la Secretaria de Estado Norteamericana Hi- llary Clinton respecto a las filtraciones de Wikileaks, o al presidente Rodríguez Zapatero cuando se disculpó por las consecuencias de la crisis; o el mismo Álvaro Uribe, quien se disculpó en su último discurso por los errores que pudiese haber cometido a lo largo de su mandato al frente de la presidencia de Colombia.


...parece que es más probable que se produzca una disculpa en un liderazgo democrático y comunicativo que en modelos más cerrados y autoritarios.


solicitudes. Por un lado encontramos aquellas en las cuales se puede atribuir una responsabilidad directa del político sobre las acciones o faltas. Del otro lado, están aquellas acciones en las que una persona pide disculpas a pesar de que no se le puede responsa- bilizar de forma directa respecto a los hechos. Los primeros son más comunes. El presidente o primer ministro de un país es considerado como la cabeza visible de éste y por tanto deberá asumir todo aque- llo que por acción u omisión pueda ser considerado


31 Campaigns&Elections Julio 2011


Liderazgo y Perdón Se podría establecer algún tipo de vínculo entre los discursos de perdón y el tipo de liderazgo así como la personalidad del orador. De este modo, parece que es más probable que se produzca una disculpa en un liderazgo democrático y comunicativo que en modelos más cerrados y autoritarios. Los represen- tantes que mantienen una relación más abierta y dialogante con su equipo (sociedad) tendrán menos problemas para manifestar su equivocación o error en determinado aspecto, valorando de este modo el trabajo y la opinión de los demás. Mientras un líder más autoritario será más reacio a este tipo de discur- sos ya que no querrá quedar en entredicho, temien- do posibles reacciones adversas del grupo opositor. Del mismo modo, resulta obvio que es más sencillo encontrar reconocimientos de faltas en regímenes democráticos que en dictaduras.


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