This page contains a Flash digital edition of a book.
Matching reinvención de nuestras organizaciones.


• El mentoring en el ámbito de la RSC (y tam- bién fuera de él) influye directamente en la mejora del clima laboral y en el incremento de la productividad al desarrollar la dimen- sión de compromiso, motivación y autoesti- ma de los colaboradores que participan en sus programas.


• De forma paralela, la necesaria prepara- ción de los voluntarios que van a ejercer como mentores, requiere del desarrollo de habilidades transversales, muchas de las cuales son directamente aplicables a su día a día como trabajadores. Habilidades como el pensamiento estratégico, la capacidad de establecer relaciones de confianza, su capa- cidad de comunicar o de desarrollar a otras personas, son competencias altamente demandadas a nuestros directivos y trabaja- dores y esenciales para ejercer el mentoring de forma eficaz. La participación en progra- mas de mentoring vinculados a proyectos de RSC están demostrando ejercer un enorme impacto en el entrenamiento y capacitación de estas habilidades.


Estos son sólo algunos de los beneficios más notables de los programas de mentoring dentro del marco de la RSC, aunque como es lógico pensar la obtención de estos beneficios


descansan en gran medida sobre la efecti- vidad en el diseño de estos programas, algo que como hemos mencionado no siempre se le dedica el tiempo o los recursos necesarios, muchas veces “justificado” por el carácter de voluntariado de este tipo de iniciativas.


¿Qué elementos determinan que un pro- grama de mentoring en el ámbito de la RSC sea exitoso?


A modo de ejemplo proponemos una serie elementos que son importantes atender antes de aventurarnos al lanzamiento de un progra- ma de mentoring aplicado a RSC, entre ellos destacamos:


• La adecuada selección, preparación y entrenamiento de los actores del pro- grama, esto es mentores y/o mentees. Demasiadas iniciativas de mentoring en el ámbito de la RSC pasan por una mera asig- nación de los roles con una escasa prepara- ción (programas de unas pocas horas) o la simple asignación de protocolos de actua- ción a modo informativo. Gran parte de los resultados potenciales, que podrían lograrse con este tipo de programas, se ven cerce- nados -o en ocasiones acaban en fracaso- precisamente por este motivo. No basta con saber para hacer y conseguir.


21


Page 1  |  Page 2  |  Page 3  |  Page 4  |  Page 5  |  Page 6  |  Page 7  |  Page 8  |  Page 9  |  Page 10  |  Page 11  |  Page 12  |  Page 13  |  Page 14  |  Page 15  |  Page 16  |  Page 17  |  Page 18  |  Page 19  |  Page 20  |  Page 21  |  Page 22  |  Page 23  |  Page 24  |  Page 25  |  Page 26  |  Page 27  |  Page 28  |  Page 29  |  Page 30  |  Page 31  |  Page 32  |  Page 33  |  Page 34  |  Page 35  |  Page 36  |  Page 37  |  Page 38