Tres miradas Como fotógrafo siempre salgo


con mi cámara encima, porque siem- pre tenemos algo para fotografiar, fotos callejeras, foto denuncia, pai- sajes...


Lo que más me gusta es el foto- periodismo, pero, aparte del fotope- riodismo, hay miles de fotos más; se trata de salir a mirar con ojo avizor nuestro entorno y nuestra gente, nuestras calles, y experimentar un encuentro con la vida.


Que la fotografía sea arte o no, o


para unos sí y para otros no, no tiene mucha importancia. Lo importante


es que sea arte para quien la realiza. Hacer las cosas como uno las siente sin preocuparse tanto de cómo las reciban los demás debe ser siempre la norma. Es en la ejecución misma de lo que uno hace donde está su va- lor máximo, que es el valor vivencial. Una amiga de la Patagonia ac-


tualmente está haciendo un curso de fotografía y me pidió que viera sus fotos y le dijera de verdad qué me parecían. Las vi, las volví a ver... Le pregunté: “vos sacas las fotos muy contracturada, ¿no?”. “Sí —me dijo— ¿cómo lo sabes?”. Es que al ver sus fo-


tos noté que quería meter dentro de ellas todo lo que estaba aprendiendo en el curso. Mi recomendación fue que se relajase, que está bueno todo lo que aprende, pero que en la foto no meta todas las reglas y normas, sino que sienta el click.


De eso se trata para mí la foto-


grafía, congelar un momento, una situación; en pocas palabras, sentir el click.


En estas tres fotos sentí situacio- nes distintas.


2Glyn Griffiths


Mirando la vida


Esta toma la realicé en la costa de mi ciudad. Vi a esa pareja de ancianos charlando y mi impresión fue justa- mente la del título, están “Mirando la vida”.


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