1.
EL LUGAR: De un año a seis meses antes.
Una vez decidido el tipo de celebración, civil o por la Iglesia, deberás tener en cuenta la época del año en que deseas casarte. Seguro que ya lo tenías pensado y has imaginado muchas veces el tipo de enlace que te gustaría celebrar. Ojo con los meses de Mayo, Junio y Julio. Son temporada alta. Si no quieres renunciar a celebrarlo en el sitio más de moda de la ciudad, corre ha cerrar una fecha aproximadamente con un año de antelación. Si la época del año no te importa, los meses como Enero, Febrero o Marzo son ideales para obtener descuentos sorprendentes.
EL VESTIDO: Seis meses antes.
Ya se sabe que para nosotras es lo más importante. Si eres de las que lo tiene clarisimo, súper estudiado y de ideas fijas, seis meses es un tiempo suficiente para que luego te tomes con calma elegir los detalles finales y complementos. Si eres una indecisa y resulta que te gustaría ser bohemia, clásica y vintage a la vez; hojea revistas, páginas web especializadas y pide cita en alguno de los diseñadores o talleres que te atraigan. Otra opción es acudir al outlet de las firmas más importantes y cruzar lo dedos para encontrar el vestido de tus sueños a un precio razonable.
2. 3. 4. 5. 8. FOTÓGRAFOS Y FLORES: Cuatro meses antes.
No te descuides. Los profesionales tienen sus agendas repletas. Para las flores de la Iglesia contacta con los novios que se casan antes o después de vosotros y poneros de acuerdo con la decoración. Apuesta por las flores de temporada. Para las mesas, diseña centros con velas, frutas y naturaleza muerta, darás un toque original y barato. Escoge bien el equipo de fotógrafos, serán tus compañeros durante todo el día. Consulta sus trabajos anteriores y matiza el estilo de reportaje que deseas. Apuesta por
www.olapic.com, una página web donde tus invitados podrán colgar sus fotos e imprimirlas en alta resolución.
EL NOVIO: Tres meses antes.
Facilítale el trabajo. Ya sabes que ellos, en general, nunca encuentran tiempo para salir de compras. En algunos casos no tendrán ni idea de por dónde empezar. Si así es tu pareja y desea llevar un traje a medida, concértale cita con alguno de los sastres clásicos de la ciudad. Nadie mejor que ellos para aconsejar al novio. Si vuestra mentalidad es más práctica no te costará nada acompañarlo a elegir un traje ya confeccionado. Clásico o moderno, el novio cada vez cobra más protagonismo.
ZAPATOS Y COMPLEMENTOS: Tres meses antes.
Ya tienes claro el vestido. Ahora te queda el toque final. Ese que rematará tu look y que muchas veces resulta definitivo para encumbrar o destruir a una novia. Los zapatos son importantisimos. Tómate tu tiempo y elígelos con el mismo mimo con que te preocupas del vestido. Ya sabes que en este apartado no sólo la estética cuenta, la comodidad será un argumento fundamental. ¿O quieres acordarte de la dependienta de la tienda toda la noche? Si quieres sacarle partido a esta compra apuesta por un modelo que puedas reutilizar, en colores neutros y tejidos que se puedan teñir.
LA MÚSICA: Cuatro meses antes.
Un DJ es más asequible que un grupo musical. Ya sabes que el éxito de la fiesta depende de lo animados que sean tus amigos, pero pónselo fácil. Supervisad personalmente su repertorio y orientarle en vuestros gustos musicales. No lo dejéis al azar. Una vez allí será imposible rectificar. Podéis sondear entre vuestros invitados los temas que más les apetece bailar ese día y ... a mover el esqueleto.
6. EL MENÚ: Dos meses antes.
Si vas a contratar un catering, tienes que tenerlo claro con mayor antelación. Estas empresas tienen que mover mucha infraestructura y sus agendas las tienen llenas no sólo de bodas, también de otros eventos que pueden coincidir con tu celebración. El menú no es la parte más engorrosa de decidir, normalmente va ligado a tu presupuesto. El día de la prueba es el más comprometido. Muchos platos a la vez, mezcla de sabores, al final ya no sabes lo que te gusta y lo que no. Un consejo: ir acompañados. Llevad a familiares con buen paladar. Siempre os aportarán otros puntos de vista.
7. EL VIAJE: Dos meses antes.
Acuérdate que Navidades y verano son temporada alta. El viaje te resultará más caro. Acude a tu agencia de viajes de confianza e infórmate sobre los paquetes de viaje para novios. Tienes muchas opciones. Si lo que quieres es un viaje exótico ten en cuenta la temporada de tifones, huracanes y demás, que no te pille desprevenida. Si nada de esto te convence resuelve tu viaje por internet, te llevará mas tiempo pero podrás confeccionarlo a tu medida.
PELUQUERÍA Y MAQUILLAJE: Dos meses antes. 9.
A estas alturas ya sabrás el tipo de peinado que quieres llevar. Déjate aconsejar por tu modisto dependiendo del vestido que lleves y por tu peluquero. Si no lo tienes claro ellos te dirán qué es lo que más te favorece. Fija una fecha para la prueba e intenta que coincida con la prueba del maquillaje, verás un resultado completo que si no te convence podrás rectificar. Aprovecha el momento para hacerte algún tratamiento que vaya preparando tu cabello.
ORGANIZA LAS MESAS: Dos semanas antes. 10.
Este es un momento crucial y en muchas ocasiones estresante. No es fácil cuadrar a los invitados. Debes tener en cuenta sus edades, su situación personal, sus amistades. Tienen que pasar una velada agradable y que nadie se sienta molesto. Pedir consejo a vuestros familiares para situar a las personas mayores. Con los amigos se supone que no tendréis problemas.
PUNTO FINAL: Dos días antes.
Tómate tiempo para ti. No pienses que es ninguna tontería. Un buen masaje, tratamiento de belleza o spa te ayudará a relajarte y olvidarte de todo el ajetreo previo. Tu piel y tu salud te lo agradecerán. En casi todos los centros de belleza te ofrecen tratamientos perfectos para novias que puedes compartir con tu pareja. Desconecta el móvil y disfruta. La suerte está echada y no has muerto en el intento.
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