Aceite de Argán De Tradición Antigua a Tendencia Vanguardista


El aceite de argán es uno de los aceites menos comunes que existe en la tierra y se dice que tiene efectos restaurativos y anti edad. Se produce de las semillas del árbol de argán, árbol que sólo se encuentra en Marruecos y está en peligro de extinción.


Originalmente, los indígenas de Marruecos, los beréberes, y más específicamente las mujeres berebere, recogían los huesos sin digerir de la fruta del argán del excremento de las cabras, las cuales suben al árbol para comer la fruta. Cada hueso contiene de una a tres semillas. El aceite, usado para cosméticos y para cocinar, se preparaba primero tostando, y luego moliendo y aplastando las semillas. Sin embargo, en los primeros años de la década de 1990, las industrias de la cosmética y la culinaria en Europa descubrieron los beneficios del aceite de argán. Comenzaron a comercializarla y a mecanizar la producción para incrementar su volumen. Esta región ya había sido reconocida como una reserva de la biosfera y con el fomento de las autoridades marroquíes, las mujeres berebere empezaron a formar cooperativas con el propósito de producir y vender el aceite de argán. La mayoría siguieron el método tradicional y optaron por producir el aceite a mano (ya sin la intervención de las cabras). El aceite producido es de una calidad superior y es más caro. Los tardados métodos tradicionales generalmente requieren de 20 a 30 horas para producir un litro de aceite.


Actualmente, el uso más común que se le da al aceite de argán es para acondicionar y reparar el cabello. Es rico en vitamina E, fenoles, carotenos, escualeno y ácidos grasos no saturados. Hay algunas indicaciones que el aceite de argán puede ser un tratamiento efectivo para la soriasis y que reduce la producción del sebo. Puede mejorar la salud y la apariencia del cabello y reparar el daño causado por los químicos y el peinado al añadir brillo sin dejar residuo grasoso, dominar el pelo encrespado y reparar las puntas maltratadas. También tiene un aroma sutil y placentero.


Otros usos novedosos que se han encontrado para el aceite de argán incluyen suavizar la piel seca y las zonas ásperas, minimizar las líneas finas de expresión, y acondicionar la cutícula. En el embarazo se puede usar para evitar las estrías y hay muchos reportes acerca de su efectividad para curar y reducir la cicatrización. Es seguro para usar sobre la piel delicada de un bebé para la resequedad y aliviar rozaduras. También está ganando popularidad como un aceite para masajes.


El aceite de argán puro y orgánico no contiene ningún químico dañino o irritante y tiene innumerables usos y beneficios, razón por la cual se está reconociendo rápidamente como una aceite milagro, de uso extensivo en la industria de los cosméticos.


Kristin Sarduy 29


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