Aromaterapia: Sanadora Comunicación con la Naturaleza II
El genial arquitecto del cuerpo humano nos dio varios sistemas interactivos para ayudar a mantener el equilibrio y la armonía, y en última instancia, la salud radiante. Estos sistemas, como el nervioso, respiratorio y digestivo, interactúan entre sí y responden a los estímulos del mundo exterior,
así como a
nuestro estado emocional interno, y promueven armonía y el bienestar en todo el cuerpo a nivel físico, emocional y mental.
Nuestra percepción del mundo llega a través de nuestros sentidos y deja una impresión en nuestro mundo interior en lo que llamamos nuestras emociones. Estas emociones son la
puerta de entrada a nuestra
realidad externa, a la forma en que percibimos y cómo nos relacionamos con el mundo, y en última instancia, qué clase de realidad que creamos. En la forma en que hacemos una conexión exterior,
interna estamos
disminuyendo de salud.
con nuestra mejorando
el mundo o
irradiación
Previamente, en la primera parte de este artículo, vimos que la mente y el cuerpo se comunican a través de la liberación de sustancias químicas naturales o “bio- químicas“, que viajan a través del cuerpo que llevan información y crean un vínculo entre los sistemas principales, la creación de una conexión entre el cuerpo y la mente. Nuestras emociones determinan
cuales entregan un sustancias
bioquímicas se liberan, inundando nuestro sistema y uniéndose a sitios “receptores“ en las células, al mismo tiempo
“mensaje”
que provoca una reacción. Como el Dr. Candace Pert explica en su libro más vendido Las moléculas de la emoción, “las emociones son señales celulares que participan en la traducción literal de información desde el cerebro hacia la realidad física, transformando la mente en materia.”
Dr. Pert explica cómo la mente y el cuerpo son inseparables, y cómo, de hecho,
la mente “la mente
no domina el cuerpo, sino que se convierte en el cuerpo” y por lo tanto
es así que las emociones juegan un papel directo en la confirmación de bienestar o enfermedad”.
Los aceites esenciales naturales pueden imitar las sustancias bioquímicas del cuerpo y el sistema de comunicación interna. Al viajar a
través del sistema olfativo
directamente a la zona central del cerebro adonde reside el instinto y la memoria (el sistema límbico), y ya que el cuerpo acepta los aceites esenciales como ya que son similares a su propia composición química, los aceites esenciales pueden crear un profundo efecto equilibrador.
Los aceites esenciales de plantas cultivadas
de manera natural,
orgánica y sobre todo biodinámica llevar el mensaje esencial de la planta hacia el cuerpo, tales como mensajes de relajamiento, estímulo o equilibrio. El cuerpo va a interpretar el
mensaje de la planta como
parte de su propia comunicación y responderá en consecuencia. Si la sustancia aromática no es de origen
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